"¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra. Con todo mi corazón te he buscado; No me dejes desviarme de tus mandamientos. En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Bendito tú, oh Jehová; Enséñame tus estatutos. Con mis labios he contado Todos los juicios de tu boca. Me he gozado en el camino de tus testimonios Más que de toda riqueza. En tus mandamientos meditaré; Consideraré tus caminos. Me regocijaré en tus estatutos; No me olvidaré de tus palabras."
Salmos 119:9-16 RVR1960
En esta era tecnológica es difícil saber qué es lo más novedoso. Por ejemplo, algunas personas solo aprenden los conceptos básicos de cómo manejar un teléfono inteligente. Pero si aprendieran un poco más, encontrarían que dicho dispositivo es más útil de lo que se imaginan. Al poner un límite a su conocimiento, se pierden de los beneficios que ofrece el teléfono para facilitar las tareas.
A veces, tenemos el mismo problema en nuestra vida espiritual. La Biblia declara que cuando llegamos a la fe en Jesucristo, somos “nuevas criaturas” "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas" (2 Corintios 5:17).
En su Palabra, Dios ha provisto todo lo que necesitamos para saber cómo vivir como nuevas creaciones, pero debemos crecer en nuestro conocimiento de dicha vida nueva.
¿Está usted tratando de vivir con los conceptos básicos de la Palabra de Dios sin profundizar ni descubrir verdades y percepciones más ricas? Si es así, está limitando su crecimiento espiritual y perdiéndose de los beneficios que da una mayor comprensión de Dios, de sus caminos y sus deseos. Puede que esté sobreviviendo, pero no está prosperando como el Señor desea. Nunca es demasiado tarde para aprender más y comenzar a disfrutar de los beneficios de la nueva vida en Cristo.
Dios te bendiga.