jueves, julio 29, 2021

Cambia tu forma de pensar.

"Te extenderás a la derecha y a la izquierda" Isaías 54:3
Dios le dijo a su pueblo: "Olvídense de las cosas anteriores; no se detengan en el pasado. Miren, estoy haciendo algo nuevo". (Isaías 43:18-19). 
Así que, si le pides a Dios una visión, o que agrande la que ya te ha dado, necesitas hacer espacio mentalmente. "Ensancha el lugar de tu tienda, extiende las cortinas de tu tienda, no te detengas; alarga tus cuerdas, fortalece tus estacas. Porque te extenderás a la derecha y a la izquierda" (Isaías 54:2-3). 
Alguien dijo que los sueños siempre vienen de una talla más grande para que puedas crecer a su medida. No te conformes con la mediocridad en tu trabajo, en tus relaciones o en tu caminar con Dios. Mark Twain dijo: "Dentro de veinte años estarás más decepcionado por las cosas que no hiciste, que por las que hiciste. Así que suelta las amarras. Navega lejos del puerto seguro. Atrapa el viento. Explora. Sueña. Descubre". Incluso si vienes de un trasfondo de adicción, pobreza, depresión, abuso y baja autoestima, Dios puede permitirte levantarte y poner fin a esa vieja mentalidad de derrota. 
En los tiempos bíblicos, las pieles de animales se convertían en recipientes para el vino. Al principio eran flexibles y fáciles de trabajar, pero con el tiempo se volvían rígidos y perdían  su capacidad de expansión. Por eso Jesús dijo: "Nadie echa vino nuevo en odres viejos. El vino nuevo debe ponerse en odres nuevos" (Mateo 9:17). 
Tira tus odres viejos! Dios no infundirá una mente fosilizada con ideas frescas, pero sí cambiará tu vida cuando alinees tu pensamiento con el Suyo. 
Bendiciones.

miércoles, julio 28, 2021

HACEDORES DE LA PALABRA DE DIOS Y NO SOLAMENTE OIDORES.

"Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos." Santiago 1:22

Existe gente con una memoria prodigiosa que son capaces de memorizar muchísimos versículos y existen otras a quienes les cuesta retener la información. Sin embargo, si el primer grupo no es capaz de poner en acción todo lo que sabe será en vano memorizar la Biblia entera. En las iglesias encontrarás dos tipos de personas: los que son oidores de la Palabra y los que son hacedores de ella, ¿en cuál de estos dos grupos estás tú? Santiago nos dice que no es suficiente con que nosotros oigamos la palabra de Dios. Él demanda que seamos hacedores de su Palabra: “No solo escuchen la palabra de Dios; tienen que ponerla en práctica. De lo contrario, solamente se engañan a sí mismos” Santiago 1:22 NVI. 
Nuestro deber es bien sencillo. Primeramente Dios nos ha dado Su Palabra para instruirnos sobre qué debemos hacer para ser salvos. Seguidamente  también nos ha dado Su Palabra para enseñarnos cómo vivir la vida cristiana luego de ser salvos. Es muy importante saber lo que la Palabra de Dios dice pero es mucho más importante obedecerla. La eficacia de nuestro tiempo de estudio bíblico puede medirse por el efecto que tiene en nuestra conducta y nuestras actitudes. De manera que,  si estudiamos atentamente y meditamos en ella, no solo nos limpia de pecado, sino que cuando pasamos tiempo con ella, realmente permitimos que la ley suprema de Dios nos convenza sobre los aspectos de nuestra conducta que necesitan mejorar. Ya sea que tengas una memoria prodigiosa o no, busca siempre la enseñanza que cada pasaje tiene para tu vida. No te conformes con solo escucharla de otros o repetir versículos frecuentemente sin meditar en ellos. Pídele a Dios que te muestre cómo aplicarlos en tu vida. 
Dios te Bendiga.

DIOS SIEMPRE PUEDE ESCUCHAR TUS ORACIONES

"Entonces Jonás oró al Señor su Dios desde el vientre del pez, y dijo: «Señor, en mi angustia te invoqué, y tú me oíste. Desde el fondo del abismo clamé a ti, y tú escuchaste mi voz."
Jonás 2:1‭-‬2 RVC
A causa de su desobediencia Jonás se encontró en la barriga de un gran pez. ¿Te puedes imaginar un lugar más solitario y que dé más miedo? Me pregunto si Jonás pensaba si alguna vez saldría de allí. Desde el interior de ese pez, Jonás clamó a Dios y por supuesto, el Señor le escuchó. 
Cuando pedimos cualquier cosa de acuerdo a Su voluntad, Él nos escucha, tal como lo asegura Su Palabra:  
"Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye." (1 Juan 5:14 RVR1960)
Tengamos  bien presente una vez más que cuando le pedimos  por nuestros sueños más locos, Dios nos escucha siempre que estemos orando de acuerdo a Su voluntad perfecta. 
El Señor escuchó los gritos de Jonás en la barriga de un pez, así también Él escuchará tu clamor allí donde estés. "Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos." (Salmo 34:15 RVR1970). 
¿Alguna vez has sentido que Dios no escucha tus oraciones? Nada podría estar más lejos de la verdad. Él no solo te escucha, sino que conoce las palabras que vas a decir incluso antes de que salgan de tu boca (Salmo 139:4). 
Saber que el Creador del Universo escucha nuestras  oraciones nos da la paz y el gozo que nuestra alma desea.
Demos gracias por la seguridad que tenemos en el Señor.
Bendiciones.

martes, julio 27, 2021

LA BENDICIÓN DE SOÑAR

"Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores. Y soñó José un sueño, y lo contó a sus hermanos; y ellos llegaron a aborrecerle más todavía."
Génesis 37:3‭, ‬5 
Imagínate si soñar tuviese precio, ¿como viviríamos? 
Solo aquellos con dinero podrían hacerlo, lastimosamente lo que no nos cuesta lo valoramos poco y mas cuando se trata de algo que no consideramos como tangible, debido a lo que la realidad que vivimos nos muestra.
Nos acostumbramos a pagar por todo, a colocarle precio y cuando hay algo que se nos es dado como regalo, pensamos que no es importante.
Esto mismo nos pasa cuando soñamos o tenemos una visión
Un sueño nos revela una idea que Dios colocó dentro de nosotros y nos ha dado de Su Palabra para que se active y lo podamos llevar a cabo, sabiendo que si estamos en ÉL, se podrá realizar.
Dios coloco un sueño en José, una promesa que cumpliría en su tiempo. Le mostró a José su futuro, lo que no le mostró fue el proceso que tendría que pasar para poder llegar a donde Dios le quería llevar.
Nadie dijo que sería fácil, pero Dios prometió estar ahí siempre, nunca sus ojos dejaran de estar atentos a tu vida.
Quizá dices que esto que vives hoy no es lo que esperabas pero es parte del proceso.
Si, Soñar no cuesta por eso es un regalo de Dios para que puedas creer y experimentar que en ÉL, lo que para los demás es imposible, en ti se hará realidad. 
Siempre encontraras personas que solo te criticaran, trataran de matar tu fe, de robarte la esperanza, personas que se rindieron y quieren que tú también lo hagas pero al final tú tomas la decisión: 
¿Decides que Dios dirija tu vida y te lleve a ese destino o deseas rendirte y convertirte en uno más?
Cada minuto que pasa es una oportunidad que pierdes, ¿qué decides hoy?
Bendiciones.

lunes, julio 26, 2021

LA VOLUNTAD DE DIOS FRENTE A LA MÍA

"Cierto día, un hombre llamado Jonás hijo de Amitai recibió un mensaje de parte de Dios: «¡Levántate, ve a la gran ciudad de Nínive y diles que ya he visto lo malvados que son!» Pero en vez de ir a Nínive, Jonás decidió irse lo más lejos posible, a un lugar donde Dios no pudiera encontrarlo. Llegó al puerto de Jope y encontró un barco que estaba a punto de salir. Pagó su pasaje y se embarcó, contento de irse lo más lejos posible de Dios."
Jonás 1:1‭-‬3
Dios le dio a Jonás una simple orden: ve a Nínive y predica a los ninivitas…y Jonás hizo exactamente lo contrario. Huyó a Jope y buscó un barco que fuera a Tarsis.  Para Jonás, esto no era una simple orden. Requería que fuera a una ciudad asiria y hablara sobre el amor de Dios. 
Los asirios eran los enemigos de Israel y Jonás no quería dar a los ninivitas la oportunidad de arrepentirse. Prefería ver la ciudad y sus habitantes destruidos. 
Jonás no comprendía la orden de Dios e intentaba imponer su propia voluntad. Él pensaba que sabía más que Dios. 
¡Qué arrogante! Cuando tomó la decisión de huir a Tarsis, estaba, en realidad, huyendo de Dios. 
Dice la Biblia: “¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos, allí estás tú; y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, aun allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra.” (Salmos 139:7-10)  Y se olvidó Jonás de que no hay ningún lugar en la tierra en el que la voluntad de Dios, Su amor y Su misericordia no nos puedan alcanzar. 
¿Cuántas veces tenemos la actitud de pensar que podemos tomar o dejar la voluntad de Dios como nos plazca? 
Cuando Dios da una orden, tenemos que obedecer, incluso cuando no la comprendemos o cuando pensamos que no es justo. Pensamos que podemos huir de la presencia de Dios. Pensamos que hay lugares en los que podemos huir de la voluntad de Dios. 
El Espíritu Ssnto nos ayuda a anhelar hacer Su voluntad perfecta para nuestras vidas cada día, nos da el discernimiento para conocer y obedecer las órdenes que El Señor nos da y nos ayuda a recordar que no hay lugar en el que nos podamos  esconder del Señor.
Bendiciones.

viernes, julio 23, 2021

DIOS SIEMPRE ESTÁ EN CONTROL

"Cuando ya estaban en alta mar, Dios mandó un viento muy fuerte que pronto se convirtió en una terrible tempestad. El barco estaba a punto de romperse en pedazos. Cada uno de los marineros, temblando de miedo, llamaba a gritos a su dios. Ya desesperados, arrojaron al mar toda la carga del barco para quitarle peso. Mientras tanto, Jonás dormía plácidamente en la bodega del barco. El capitán se le acercó y le dijo: —¡Qué haces aquí, dormilón! ¡Levántate y pide ayuda a tu dios! ¡Tal vez nos salve al ver que estamos en peligro!"
Jonás 1:4‭-‬6 
Cuando los marineros vieron la gran tormenta que arreciaba y amenazaba la integridad del barco, comenzaron a llamar a sus dioses. Esa es una reacción muy humana.  
El problema era que ninguno de ellos podía ayudarles, solo Dios, el creador del universo, el Dios de la Biblia, el único que controlaba la tormenta. Él era el único capaz de detenerla tal como lo dicen las Escrituras: “Porque yo sé que Jehová es grande, y el Señor nuestro, mayor que todos los dioses. Todo lo que Jehová quiere, lo hace, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.” (Salmo 135:5-6)
Dios está en control del tiempo. Él está en control del viento y de las tormentas.  “Yo daré la lluvia de vuestra tierra a su tiempo, la temprana y la tardía; y recogerás tu grano, tu vino y tu aceite.” (Deuteronomio 11:14). 
Él está en control del tiempo hablando metafóricamente también. 
No hay tormenta en nuestras vidas que no esté bajo el control de Dios.  ¿Qué haces cuando las tormentas arrecian en tu vida? ¿Qué haces cuando lo único que ves en el horizonte son nubes negras? ¿Clamas a Dios? 
El Señor Todopoderoso está en control no solo del tiempo, sino también de cada mínimo detalle de nuestra vida. Él es la  primera opción cuando la tormenta llega.
Que el Señor nos permita ser una luz para aquellos que están en el medio del mar sin esperanza y ayudarles a llegar al puerto seguro que tenemos en Él.
Bendiciones.

jueves, julio 22, 2021

DIOS ESCUCHA NUESTRA PETICIÓN DE AYUDA

"Me arrojaste a lo más hondo, a lo más profundo del mar; la corriente me envolvía, y todas tus olas poderosas pasaban sobre mí. Pensé: “Me has echado de tu presencia, pero así y todo yo seguiré rogando hacia tu santo templo”.
Jonás 2:3‭-‬4
Jonás estaba en medio del mar profundo, rodeado de agua y altas olas. Estaba en medio de la oscuridad, desesperado y preguntándose si Dios todavía estaba allí. Necesitaba ayuda y no tenía a nadie más que a Dios a quien recurrir.  Estando en el medio del mar, su primer pensamiento fue que Dios no podía verlo. 
A veces nos sentimos así también. Hay situaciones y tiempos difíciles en los que pensamos que Dios nos ha abandonado. Solemos olvidar que Dios siempre nos escuchará cuando clamamos por ayuda, así como dice:  “Decía yo en mi premura: Cortado soy de delante de tus ojos; Pero tú oíste la voz de mis ruegos cuando a ti clamaba.” (Salmo 31:22)
Siempre nos escucha.  Y eso es lo que Jonás hizo. Clamó al Señor y reconoció que le necesitaba. 
Recordemos lo que dice Hebreos 4:16  “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”.
El enemigo a veces quiere que pensemos que no podemos acercarnos a Jesús pero, como tenemos un sumo sacerdote que es omnipotente y compasivo, podemos llegar confiadamente ante Su trono. 
Dios provee ayuda en tiempos de necesidad. No hay ninguna petición demasiado pequeña ni demasiado grande para Él. 
Él siempre escucha nuestro grito de ayuda. 
Bendiciones.

miércoles, julio 21, 2021

NO LE TEMAS A LOS RETOS.

"Y mirándole Jehová, le dijo: Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo? Entonces le respondió: Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre."
Jueces 6:14-16
Todos a menudo afrontamos en la vida nuevos retos que traen consigo pruebas, dudas y temor. Cuando Dios nos presenta retos a nuestros ojos muchos de ellos parecen imposibles de realizar y no es para lastimarnos ni hacernos sentir incapaces sino para mostrar su poder a través de nuestras vidas. En la Biblia encontramos personajes que pasaron por una situación similar. En Gedeón por ejemplo vemos materializado la vida de un hombre común que realizaba una tarea rutinaria y beneficiosa para su comunidad, hasta que un día Dios presentó delante de él un reto que afrontar. Como el pueblo de Israel se había apartado de Dios, Él permitió a los madianitas aterrorizar a Israel por siete años y destruir los frutos de su tierra y ganado. En su necesidad Israel clamó a Dios y en respuesta a ese clamor, Él decidió que sería Gedeón quien llevaría a su pueblo a la victoria. Seguramente al igual que Gedeón tú también te sorprenderías cuando te encuentras con semejante reto delante de ti, a continuación, en Jueces 6:15-16 leemos su reacción: “…Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre. Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.” 
Quizás el temor, el miedo a fallar o las críticas destructivas que los demás hacen de ti te llevan a pensar que no eres la mejor opción para el plan que Dios ha calculado, pero sin duda, Dios ha decidido que seas tú quien esté al frente, fuiste escogido por tu Padre porque verdaderamente eres capaz de cumplir con ese llamado. Nunca des crédito a los malos comentarios que te hagan dudar de las capacidades que Dios te ha dado, pues si fuiste elegido no es por tu apariencia, por cuánto sabes, ni por cuánto tienes, sino porque Dios encontró agrado en ti, así que ¡sé valiente y esfuérzate!, Dios ha estimado un plan para ti sabiendo que lo lograrás. No tengas temor, recuerda que los retos vienen acompañados de un respaldo Divino. 
Dios te Bendiga.

Enfócate en lo que durará para siempre

“Por lo tanto, no nos importa lo que ahora se ve, sino que fijamos la mirada en lo que todavía no vemos. Porque lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve no cesará jamás”.
2  Corintios 4:18 (NBV)
Los seres humanos pueden manejar una enorme cantidad de frustración, retrasos y dolor mientras tengan esperanza.
Pero cuando la esperanza se acaba, la gente se da por vencida.
Jesús ofrece la única esperanza eterna. Y es una esperanza que nunca defraudará. Pero necesitas la perspectiva correcta para comprender la esperanza que se encuentra en Jesús.
Eso significa que no solo miras lo que está sucediendo en este momento. En lugar de enfocarte en lo temporal, enfócate en lo eterno. Por ejemplo, presta más atención a la Palabra de Dios que a las noticias en tu teléfono celular.
Las dificultades no duran. Pero la esperanza en Dios es para siempre. La Biblia dice: “Tres virtudes hay que ahora permanecen: la fe, la esperanza y el amor. Pero la más excelente de ellas es el amor” 1 Corintios 13:13 (NBV).
Es bueno tener presente cuando estás pasando por un momento difícil, que no importa cuáles sean las circunstancias, siempre  temporales. Ningún problema viene para quedarse en tu vida. Pasará. Incluso si es un problema crónico de por vida, no lo llevarás a la eternidad.
Pablo nos recuerda esto en 2 Corintios 4:18: “Por lo tanto, no nos importa lo que ahora se ve, sino que fijamos la mirada en lo que todavía no vemos. Porque lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve no cesará jamás” (NBV).
Tus problemas no durarán para siempre. La pandemia de coronavirus no durará para siempre. La incertidumbre con la economía no durará para siempre.
Pero hay cosas en el universo de Dios que no puedes ver, que durarán para siempre. La fe, la esperanza y el amor durarán para siempre. Y si confías en Jesús, estarás con Dios para siempre en la eternidad.
Pon tu esperanza en Jesús. “Llenen sus pensamientos de las cosas de arriba y no en las cosas de este mundo” Colosenses 3:2 (NBV).
Tu esperanza en Cristo se convertirá en una esperanza de vida plena.
Bendiciones.

lunes, julio 19, 2021

LA BUENA DISPOSICIÓN DE SERVIR A DIOS.

"Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí."
Isaías 6:8
En cierta forma todos constituimos parte de un sistema, por lo que sin importar a donde vayamos seremos parte de un grupo, ya sea en el colegio, trabajo, en el sector en el que vivimos, con los amigos, en la misma familia y hasta en la iglesia. ¿cuentan las personas que te rodean con tu total disposición de ayudarles? Aquellos que están dispuestos a apoyar siempre son una bendición para el grupo en el que se encuentren.
¿sabías que el Señor también busca personas dispuestas a servirle? La mayoría de las personas no solo son renuentes a servir a Dios, sino que de hecho se niegan a hacerlo, manifestando un espíritu ingrato, egoísta, independiente y hasta rebelde. Jehová quiere que le sirvamos de buena gana y con entrega, ya que nunca nos obliga a efectuar su voluntad, pero sí se agrada de personas dispuestas a hacerlo. Una de las razones por las que muchas veces Dios no puede contar con nuestra ayuda es porque nuestras prioridades no están del todo bien establecidas, de modo que dedicamos la mayor parte de nuestro tiempo y esfuerzo a satisfacer nuestras propias necesidades y requerimientos. No permitamos que el amor a nuestra propia persona prevalezca sobre el que le debemos a Dios, pues corremos el riesgo de servirle a regañadientes y sin interés. Es así  como les ocurrió a los israelitas que perdieron el amor a Dios, pero seguían sirviéndole solo por cumplir, hasta que su servicio se convirtió en aburrimiento, como se lee en Malaquías 1:13 “Habéis además dicho: ¡Oh, qué fastidio es esto! y me despreciáis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? dice Jehová.” 
A partir de hoy empieza a ser una bendición en donde estés, a ser un apoyo en el grupo que te encuentres, y por supuesto también en la obra de Dios. 
Dios te Bendiga.

domingo, julio 18, 2021

Dios escucha nuestra oración

"Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras."
 Daniel 10:12
Desde su juventud, el profeta Daniel oraba a Dios con una gran fe. Oraba fervientemente por su pueblo exiliado junto con él en Babilonia. Oró durante 21 días (Daniel 10:13), y aunque la respuesta solo llegó al final de las tres semanas, Dios lo escuchó desde el primer día. Estaba atento a las preocupaciones de su muy amado siervo, quien temía por el futuro de su pueblo.
El libro de los Hechos dice que Cornelio, comandante de una compañía del ejército romano, quien todavía no conocía el Evangelio, oraba continuamente. ¿Lo escucharía Dios? Por supuesto: le envió un ángel para que le dijese: “Tus oraciones y tus limosnas han subido para memoria delante de Dios” (Hechos 10:4).
Cuando Agar y su hijo estaban en el desierto sin recursos, Dios escuchó la voz del niño: Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está. (Génesis 21:17).
Dios escucha nuestras oraciones, se acuerda de ellas y no olvida ninguna. Muy a menudo, solo después de haber recibido lo que pedimos (curación, éxito en un examen, etc.), creemos haber tenido una respuesta de parte de Dios. Pero Dios responde de varias maneras: a veces dice “sí”, otras veces dice “no”, o incluso dice “espera un poco”. ¿Sabemos discernir su respuesta?
Dios siempre escucha nuestras oraciones, incluso nuestros suspiros. Permanezcamos serenos y confiemos en el amor de Dios: la buena respuesta llegará en el momento oportuno.
Jesús oraba continuamente y decía a su Padre: “Yo sabía que siempre me oyes” (Juan 11:42). 
Dios siempre está atento para escuchar la voz de sus hijos, y responde en el momento oportuno, tal como lo asegura Su Palabra:  
Así que, cuando tengamos alguna necesidad, acerquémonos con confianza al trono de Dios. Él nos ayudará, porque es bueno y nos ama. (Hebreos 4:16).
Bendiciones.

jueves, julio 15, 2021

LOS PRINCIPIOS DE DIOS

“Pero yo, Señor, confío en ti; yo he dicho: Tú eres mi Dios. Mi vida está en tus manos.” Salmos 31:14-15
Cuando caminas bajo los principios de Dios, lo más seguro es que tengas éxito.  Muchas veces se te puede hacer difícil caminar por esos principios cuando accedes caminar por tus principios. Los principios de Dios son extremadamente diferentes a los principios con los cuales has crecido. El éxito en la vida de cada ser humano consiste en andar bajo los principios de Dios.
El salmista lo tenía claro, él además de confiar en Dios, declaraba que su vida estaba en sus manos; lo que quiere decir, que el salmista caminaba bajo los principios de Dios y tenía éxito en todo porque vivía bajo estos principios:
- El entendía que para recibir hay que dar
- Para vivir hay que morir a nuestros principios
- Para subir hay que bajar
- El que se humilla, Dios lo exalta.
La grandeza de una persona está en servir, en soltar a lo que está aferrado.
Así que, la naturaleza nuestra está en aferrarnos a cosas que son pasajeras. Soltar es un principio que te enseña a: soltar tu pasado, soltar heridas emocionales que te han causado, a soltar tus miedos pues cuando sueltas comienzas a disfrutar de un nuevo comienzo y puedes crear un futuro de gloria, bajo los principios de Dios.