"Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya."
Lucas 22:42
Cuan imprescindible le es al cristiano vivir en la voluntad de Dios. Se dice muy fácil pero es difícil hacerlo. Aquí Cristo ejemplo nos dio en su oración, un modelo para imitar. Él se encontraba en un punto culminante de su ministerio, decisivo y lleno de tensión porque sabía lo que conllevaría hacer la Voluntad del Padre.
Sin embargo esta fue su oración: "que no se haga mi voluntad sino la Tuya". Cuántos de nosotros decimos estas palabras sinceramente, sabiendo todo lo que implica, todo lo que representa y todo lo que sacrificamos?
Vivir en la voluntad de Dios significa entregarte en cuerpo y alma al Señor, hacer lo que Él te pide que muchas veces irá por encima de tu propia opinión.
Atrévete a vivir así, a orar de esa forma: Señor quiero hacer tu Voluntad.
Vale la pena poner a Dios primero y nunca olvides que aunque a veces no lo entendamos "La voluntad del Señor es buena, agradable y perfecta".
Bendiciones.