“Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.”
2 Timoteo 1:6.
Se dice que existen tres tipos de personas, las pocas que hacen que las cosas pasen, los muchos que ven las oportunidades pasar y la gran mayoría quienes ni siquiera tienen noción de lo que está pasando. La mediocridad es muchas veces vista como normal o lo predominante en muchas áreas. Muy pocos analizan con objetividad la posibilidad de enfrentar el reto de ir más allá de nuestras habilidades y capacidades conocidas, por lo que es necesario entender que desperdiciar el propósito y el potencial de tu vida es una tragedia.
Hay dos tipos de potencial, el natural y espiritual; el primero es con el que la persona nace, que algunas veces es heredado por la familia y que además se puede desarrollar en el diario vivir; mientras que el espiritual es el potencial recibido en el momento del nacimiento espiritual o de la conversión a Dios, que es dado por el Espíritu Santo y se conoce como, gracia, talento o ministerio.
Ahora bien, es necesario comprender que tu potencial no será desarrollado hasta que asumas un compromiso con tus pensamientos, planes y sueños.
Cuando observamos el mundo vemos que está lleno de seguidores, supervisores y jefes, pero muy pocos líderes. Tú puedes ser uno de esos pocos si usas el potencial que Dios deposito en ti, porque Él creó a cada ser humano con un potencial de liderazgo. Muchos se van a la tumba sin desarrollar su potencial, más aun, hoy día podemos ver en las calles gente que ha tenido sueños, deseos, aspiraciones, pero están perdidos en la mediocridad, resignados o acomodados a su situación y condición. Pero también hay otros que desarrollan sus capacidades y llegan a ser hombres y mujeres diferentes que impactan al mundo en las diferentes áreas que se desenvuelven no importando la raza y la cultura.
El mundo entero está necesitando de líderes que inspiren a otros a seguir y a cumplir el propósito y el destino que Dios planeó para sus vida. Se tú uno de ellos.
Dios te Bendiga.