martes, diciembre 23, 2008

VIVE POR FE

Números 14:24
“Pero a Mi siervo Caleb, porque ha habido en él un espíritu distinto y Me ha seguido plenamente, lo introduciré a la tierra donde entró, y su descendencia tomará posesión de ella”.

Los tiempos difíciles son inevitables. Y eso necesitas saberlo. Es verdad que hemos sido redimidos de la maldición, y que no hay nada que satanás pueda hacer para revertirlo, pero él va a desafiarte. Por lo tanto, no te sorprendas cuando las circunstancias sean adversas. Vendrán tiempos cuando tendrás que hablar y actuar teniendo en cuenta que lo que Dios dice es verdad aún cuando no lo puedas sentir o ver suceder a tu alrededor. Caleb fue uno de los que permaneció amarrado a la Promesa de Dios a pesar de lo que las circunstancias y el pueblo alrededor decía. Tal vez encuentres oposición aún en el círculo más íntimo pero persevera, te garantizo que tendrás la victoria. No seas fluctuante, no seas de doble ánimo. Santiago 1:6-8 dice: “Pero que pida con fe, sin dudar. Porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada por el viento y echada de una parte a otra. 7 No piense, pues, ese hombre, que recibirá cosa alguna del Señor, 8 es indeciso e inconstante en todo lo que hace”. Muchas personas oyen la palabra de fe sobre sanidad o prosperidad y piensan: “Voy a probar eso”. Luego cuando vienen los tiempos duros, abandonan y se rinden. Déjame advertirte que vivir por fe no es algo que pruebas. Es un estilo de vida. Tú lo haces cuando es difícil, lo haces cuando es fácil. Lo haces todo el tiempo. Porque no lo estás haciendo sólo por los beneficios, lo estás haciendo porque sabes que esa fe le agrada a Dios. y lo único que hace mover a Dios a tu favor es tú fe. Hebreos 11:6: “En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera que se acerca a Dios tiene que creer que Él existe y que recompensa a quienes lo buscan diligentemente”. Si tú y yo vamos a ver a Dios haciendo lo imposible en nuestras vidas, tenemos que limpiarnos de toda incredulidad. Hoy debes tomar la decisión irreversible de creer a la Palabra de Dios y elegir el caminar por fe como un estilo de vida. Toma las Promesas de Dios para cada una de tus circunstancias, medita en ellas hasta que la fe crezca en tu interior, establece la verdad de la Palabra en tu espíritu y en tu mente mediante la confesión y actúa. Alinea tu cuerpo y tus acciones a lo que crees. Desde hoy en adelante considera resuelto tu problema y da alabanzas al nombre de Jesús. El Hebraísta dice que Dios es galardonador, recompensador de los que le buscan diligentemente. Camina en Fe, hazlo porque eso agrada a tu Padre que te ama, y decreto apostólica y proféticamente que recibirás mucho más abundantemente de lo que estás pidiendo o esperando.

“Padre celestial, gracias porque aunque las circunstancias puedan volverse duras, saldré victorioso. Me niego a desmayar y caer. En el Nombre Poderoso de Jesús, Amén”.